Una Sigilosa Mirada

En las turbias noches de una vida
Aún encontrando las pocas palabras que alrededor de un tiempo
Algunos piensan que han sido insuficientes
O peor aún poco válidas, para seguir en la alucinación de tales ideas
Y que tal vez en aquellos ocultos escenarios
Se encuentra la sigilosa mirada del ojo humano
Observando los ensueños que vienen después de cada sueño.

Después de haber dormido un largo rato!
Se consume lentamente por no estar pendiente de nuestro alrededor
Siento reales a las manifestaciones marcadas por el duro sello
De la cotidianidad, de la realidad
Se opaca el cristal transparente en el tiempo
Dejando todo a nuestro alcance, simple y fuerte.

Se abren los ojos, y se ve la oscuridad de la noche
Todo lo que esconde...
Arden los fuegos que por siglos han esperado la luz
De los más incesantes sentidos, como golpes a la mente
Como latidos al corazón
Como la exhalación rítmica de los pasos
Aún se escucha la danza
La melodía excitante que ella reclama
El mundo que se abre tras los brazos de la madre
Que arropa a sus hijos y les da calor en las noches de soledad.

El suspiro que llega lentamente
Dando el aviso a la terminación del estado más profundo de los sueños
Nuevamente como todos los cambios constantes
Dan el anuncio de una pronta señal
Más reflexivo aquello que aquejan las visiones.

Frente, la extraña mancha...
Que con el tiempo trata de tomar alguna figura extraña
La vida es reflejada en sueños
Mundos paralelos, interprétalos y sabrás que muy en el fondo
Todo cuanto existe, todo cuanto somos
Y lo que somos no lo podemos evitar.

Algunas lágrimas confusas
Las pocas espinas que rompen los dedos delicados
Los esfuerzos insólitos e inesperados
Una herida abierta
Que se desata sin pedir permiso.

Jade Akasha